" ¿Por qué mi hijo se aburre rápido de sus juguetes? No les hace mucho caso. Hemos invertido en algunos juguetes caros y solo les ha hecho caso los primeros días, hace meses que no toca muchos de los juguetes que tiene, siempre acaba jugando con lo mismo o se dedica simplemente a sacarlo todo."
Estas son algunas de las preguntas y comentarios que recibo prácticamente a diario de las familias. Y es que es totalmente cierto. La mayoría de niños juegan poco con sus juguetes en general, al menos con la mayoría de los que tienen en su zona de juegos.
¿POR QUÉ MI HIJO SE ABURRE RÁPIDO DE SUS JUGUETES?
Bueno, la gran pregunta. Tengo que decirte que no hay una sola respuesta y que aunque parezca lo contrario, la causa no está en tu hijo. Vayamos por partes. Quizá si desgranamos todo puedas entender mejor lo que está pasando.
LA ETAPA DEL NIÑO/A: ¡Es increíble! Hay niños y niñas que antes de nacer ya tienen más juguetes en su habitación de los que tuve yo en toda mi vida. Estamos ante la generación de los excesos materiales desde el nacimiento. ¿Sabes? Un bebé tarda exactamente 90 segundos en reconocer un objeto. Esos 90 segundo son los que tarda en aburrirse también de él y pasar al siguiente. ¡El mundo es muy grande y hay mucho por conocer! Hasta los tres años los niños están adquiriendo experiencias, que a través de la repetición irán poco a poco discriminando y ordenando en su cerebro. Es un etapa de adquisición, pero todavía no hay concentraciones muy prolongadas en una determinada actividad.
EL OBJETIVO DE LOS NIÑOS Y NIÑAS: Hasta los tres añitos el objetivo de los niños y niñas es la adaptación. Para adaptarte a un lugar (en su caso el mundo) tienes que conocerlo y tener seguridad sobre lo que te rodea. Por ello, su interés está en los objetos cotidianos. Lo triste es que, precisamente, es de los objetos cotidianos de los que les queremos separar: les quitamos las llaves, les quitamos el mando, les quitamos la cuchara, les quitamos el bote que quieren abrir y cerrar... El niño quiere explorar todo eso que a diario ve a su alrededor, todo eso que ve manipular a sus referentes (papá y mamá). Por eso, no. NO valen las llaves de juguete. "Ese objeto no es el que yo te veo coger cada día" Yo quiero las llaves de verdad. Aunque nos empeñemos en colmarles de juguetes que son "representaciones de la realidad" el niño seguirá anhelando vivenciar la propia realidad para adaptarse a ella. Seguirá estando deseoso de chupar, toquetear, abrir y cerrar los objetos cotidianos que le rodean. Esas pequeñas acciones con objetos cotidianos como abrir y cerrar un bote, por ejemplo, serán claves para el desarrollo de su inteligencia y el comienzo de esas primeras concentraciones más prolongadas, en búsqueda del entendimiento y el perfeccionamiento.
EL EXCESO: Estamos en una era de excesos materiales. Educamos a los niños en el "tener" y después nos alarmamos porque no comparten, porque son caprichosos, porque no valoran lo que tienen... Desde que son pequeñitos les colmamos de juguetes y juguetes... A veces tienen tanto, que ni siquiera cabe en sus dormitorios o en sus zonas de juegos y tenemos que llenar baúles, arcones... Te diré algo, por si alguna vez te asalta esa culpa sobre "si le comprara esto o lo otro sería más feliz": los niños lo único que quieren es pasar tiempo con nosotros de calidad ¿Haciendo qué? Pues tareas cotidianas. Lo único que quieres es sentirse valiosos, importantes, escuchados, respetados... Haz la prueba: sal a la naturaleza y dale una tarde de conexión y juego al aire libre y al día siguiente dale una tarde en su habitación repleta de juguetes. Cuando hay tanto dejas de valorar y de interesarte por lo que tienes. ¿No te ha pasado nunca a ti? A mí se me viene a la mente cuando mi madre hace una pequeña tortilla: ese día la tortilla triunfa, incluso el pequeño trozo que te toca te sabe como hace tiempo que no lo recordabas. Sin embargo, si otro día hace 4 tortillas y las pone encima de la mesa: a veces ni sientes ganas de probarla, cuando hay mucho apetece menos.
EL DESORDEN: Una consecuencia de ese exceso es el desorden. Que haya mucho implica amontonar. Implica caos. Para sacar un juguete del que se acuerda, necesita sacar primero otros 15 que hay encima en el cajón (baúl, arcón, contenedor)... Y cuando llega a él ya se ha distraido tanto que el interés se ha esfumado y ahí se acaba el juego, eso suponiendo que llegue porque a veces ni lo encuentra. Un juego que sólo ha consistido en sacar y desordenar (aún más). El desorden les dificulta la concentración, la autonomía, la repetición... El niño necesita orden externo para construir su orden interno.
LA FALTA DE PRESENCIA: Quizá compramos en exceso porque queremos que los juguetes nos sustituyan y entretengan a los niños un ratito. A veces el niño no quiere jugar porque siente que pierde nuestra presencia y no quiere renunciar a ella, no puede renunciar a ella: la necesita. Papá y mamá son su nexo de unión con el mundo, su anclaje. Los juguetes nos pueden sustituir involuntariamente a veces un ratito. Lo que ocurre es que llenamos al niño de juguetes para compensar nuestra falta de presencia y entonces estamos desvirtuando todo su sentido. Los niños necesitan presencia y nosotros necesitamos tiempo. La forma más sana de equilibrar necesidades es integrarles en nuestros quehaceres, en nuestras tareas...Entonces todo fluye de otra manera, incluido el juego.
LA LIMITACIÓN DE LA CREATIVIDAD Y LA VERSATILIDAD EN EL JUEGO: Parques de bomberos, con todos los detalles, coches de policías, heladerías para hacer helados... Pero igual que cuando tienes unos días libres te apetece conocer lugares nuevos. Cuando los niños juegan también les apetece explorar de diferentes formas. Los juguetes tan definidos limitan su juego y puede que un día me apetezca jugar a hacer helados, pero otro día quizá me apetece simplemente crear la heladería y no puedo porque ya está creada. El juguete es más protagonista que el niño, limita su creatividad y sus opciones de explorar.
LA FALTA DE TIEMPO: educamos con prisa, y eso implica un ritmo frenético diario que va "contra natura". El niño necesita tiempo: porque está aprendiendo y para aprender se necesita practicar, equivocarte, repetir, volver a hacerlo, volver a equivocarte... Todo eso requiere TIEMPO, que es justo lo que no tienen. Pasan largas horas en el cole y después están llenos de tareas, extraescolares... Llegan cansados física y mentalment como para jugar.
LAS PANTALLAS: las pantallas absorben no solo a los niños, también a los adultos. Cada vez pasamos más tiempo frente a las pantallas, y ese tiempo es tiempo que en otro caso pasarían jugando, creando, pensando, tocando, practicando habilidades sociales... Encender una pantalla es apagar a un niño. Ya no es lo que consumen frente a las pantallas, es lo que dejan de hacer.
¿EN QUÉ FIJARME A LA HORA DE ELEGIR JUGUETES?
1. En los juguetes que ya tiene: recuerda el exceso es perjudicial. Se pueden regalar experiencias, excursiones, visitas a nuevos lugares que el niño no conoce...
2. Cuanto menos definido el juguete más opciones de juego: ¿Por qué crees que los niños siempre acaban jugando con la caja del juguete? Porque la caja puede ser lo que ellos quieran. Elige juguetes que permitan muchas posibilidades.
3. Belleza y naturalidad: fíjate en cómo son sus piezas. Una vez nos regalaron un laberinto de plástico. Las piezas no pesaban, se desmontaban a la mínima, tenían colores chirriantes... Sabía a ciencia cierta que no funcionaría. Efectivamente al día siguiente el juego fue desmantelarlo y ahí quedó. Las piezas estuvieron en una cestita un tiempo y ni caso. Elige, si es posible, materiales nobles, naturales: inspiran cuidado, valor, tienen consistencia, suenan...
4. Intereses del niño: una pregunta típica de los padres es ¿Y esto para qué edad? Elegimos los juguetes según las edades y nos tenemos que empezar a fijar en lo que mi hijo domina, lo que le gusta, en lo que se interesa, en lo que muestra habilidad...
EJEMPLO DE JUGUETES QUE TENEMOS EN CASA Y QUE HAN DADO YA AÑOS DE JUEGO
Quiero mostrarte ejemplos de juguetes sencillos que tenemos en casa y que han dado ratos y ratos de juego. Muchos de los que vas a ver los tenemos desde hace años y el peque los ha usado hasta la saciedad. Ha creado obras, carreteras, mandalas, dibujos, ha apilado, ha construido comisarías, parques de bomberos, peluquerías, ha creado naves espaciales, obras... Fíjate en la sencillez, los colores inspiradores, la nobleza de los materiales... Y por supuesto, siempre los tenemos ordenaditos por tipos en cestitas a su alcance... No pienses que no hemos tenido en casa los juguetes típicos de plástico, le han regalado un montón. Algunos los ha usado un tiempo y otros ni eso... Pero estos básicos siempre los ha ido combinando en sus juegos, son como un "fondo de armario". En casa lo que no se usa, se retira, y estos llevan muuucho tiempo con nosotros.
Elementos naturales que simbolicen personas, pero que no limiten ni acoten (sexo, profesión, género...)
En casa tenemos muchos materiales naturales como piedras redondeadas, conchas, bloques de madera, piñas, palos, arena... También nos da mucho juego los elementos naturales de juego. Son geniales este tipo de materiales que te voy a mostrar:
Para esto estos años hemos usado los NINS DE GRAPAT y los BROTS. Puedes encontrarlos en la web Juguear
También hemos usado elementos naturales y bloques de madera para hacer construcciones. Piedras, arena, palos...
LAS MONEDAS Y ANILLAS DE GRAPAT TIENEN UN USO MUY VERSÁTIL: Se puede insertar, apilar, utilizar para hacer combinaciones, jugar con sus colores, asociar...
Carretes que son ideales para apilar, rodar, enhebrar..
Si te han gustado las propuestas y estás pensando en alguna de ellas para casa, para regalar o incluso para Navidad te cuento que hay una tienda donde los puedes encontrar ahora muy bien de precio. Se trata de la web JUGUEAR. Tienen descuentos en su web de hasta el 40%. Además regalan una bolsita Tote bag súper bonita con pedidos de más de 35 euros. ¿Durante cuántos días? Del 21 al 27 de octubre.
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