Atención: No leas este post si no quieres saber más sobre la filosofía Montessori.
¿Qué? ¿Pero esta que dice hoy? No estoy loca. Sólo quería que comprobases que, efectivamente, cuando nos dicen NO se nos despiertan las ganas de hacer todo lo contrario.
Si a estas alturas sigues leyendo te habrás dado cuenta de que la palabra NO invita a hacer todo lo contrario.
El "NO" nos produce rechazo, negativiza cualquier acción. Además prohibir reaviva el deseo de hacer justo lo contrario. Cuando abusamos del "NO" este pierde totalmente su poder. Además crea una predisposición negativa en la mente del niño.